Relato sexual de una infidelidad con una amiga mayor que yo

Hablar de ella es hablar de una parte de mi vida y de mi madurez sexual, su nombre es Cindy Sanchez. La conocí en el año del 2012 como a mediados de julio, ella entró como agente de ventas y desde que la vi pensé que una mujer como ella jamás estaría conmigo.

Cindy, es apiñonada, ojos verdes, tetas grandes, piernuda, nalgas no tan grandes pero paradas, el tipo de mujer que todo hombre desea, así es ella, en aquel entonces yo tenía 24 años y ella 33.

Comencé a hablarle por Paula Maria, así es, la hermana de Evelyn fue la intermediaria para que comenzara una amistad con aquel monumento de mujer.

Yo siempre le tuve ganas, me encantaba verla con minifalda, esas piernas, sus ricos y sensuales pies, sus tetas en sus escotes, afortunadamente Cindy me daba entrada, me dejaba abrazarla, comíamos juntos, comenzamos a volvernos confidentes, yo sabía de los problemas con su familia, de su separación de su esposo y de sus gustos, pero honestamente veia lejana la posibilidad de encamarme con ella.

En el año 2013, ahí por el mes de febrero es mi cumpleaños y ella muy amablemente me quiso festejar algo, yo ya tenía planes con mi prometida así que en lugar de que fuera el mero día lo dejamos para el día viernes.

Ese día fuimos a una cantina donde había música en vivo, Cindy se veia muy bien, llevaba una calza café y una blusa negra con escote, la verdad yo la tenía bien parada solo de verla.

Comenzamos a tomar cerveza, cantábamos y reíamos, la verdad la estábamos pasando muy bien.

O: Gracias por venir conmigo.

C: Para nada, eres muy buen cuate, mínimo eso de regalo.

Bebimos y nos pusimos a bailar, ella se movía fantástico, su cuerpo lucía fantástico cuando bailamos salsa y cuando bailaba merengue, aunque con la música de banda yo le gane.

O: ¡Qué bien bailas, eh!

C: No manches, ¿no te has cansado?

O: Apenas empiezo, ¡jaja!

C: ¡Benditos 20!

Nos sentamos en la mesa después de una buena tanda de baile, yo no podía más con las ganas de cogerla, así que decidí tratar de conseguir algo con Candida.

O: ¿Oye te puedo decir algo?

C: Dime, que pex!

O: Me gustaría que me dieras la oportunidad de estar contigo!

C: ¡Pues estás conmigo!

O: Jaja, lo sé, pero más íntimamente, osea, quiero hacerlo contigo!

Ella solo se rio pero se puso roja, su primera contestación fue negativa, ya que decía que podía ser mi madre, pero yo le conteste que no lo era.

No insistí más, pedí dos cervezas más y fui al baño, honestamente pensé que ya la había cagado y que eso había arruinado el festejo.

Cuando regresé a mi lugar ella estaba sentada y un poco seria, no quise decir nada, pero fue entonces que ella tomó la palabra.

C: Pinche Oswaldo, tienes algo que me gusta y la verdad nunca he estado con alguien más joven.

O: ¿Y eso qué significa?

C: Que está bien, te voy a dar tu regalo.

No me lo podía creer, esa mujer que muchos han deseado, que tiene un cuerpazo, 10 años mayor que yo, me estaba dando la oportunidad de penetrarla.

Salimos del bar y nos fuimos por insurgentes a un hotel que seguramente ella ya había ido, al llegar a la habitación no dude en besarla, ella no me rechazó, de hecho sus labios y los míos se acoplaban perfectamente, mis manos acariciaban sus duras y paradas nalgas, baje a su cuello saboreando y acariciando sus tetas, ella también me acariciaba y me quito la camisa.

relato infidelidad con una amiga mayorNos fuimos a la cama y ahí al tumbe y comencé a quitarle su ropa, primero su blusa besando su rico abdomen, luego su brasier dejando al descubierto esas grandes tetas con pezones rosas y con un percing en cada uno de ellos, mi lengua saboreo esas delicias y mi verga estaba super dura.

Le baje su calza y su tangita color negro, bese sus ricos y hermsoos pies saboreandolos por completo, subi lentamnete saboreando sus piernas y sus muslos hasta llegar a su rasurada y rosada vagina.

O: ¡Qué rica estás!

C: ¡¡Uhm!! ¡Aprovecha tu suerte!

Me desnude totalmente y me dirigí comerme su coño, probaba sus labios vaginales húmedos, ella gemía suave y me apretaba la cabeza, metí mi lengua en su coño y comencé a saborear su rico clítoris, no me cansaba de comerme su humedad.

C: Que rico, ¡¡uhm!!

O: ¡Qué hermosa vagina!

No me despegue ni un minuto de su coño, Cindy se retorcía como gusano y me mojaba toda la boca, mientras me devoraba su coño mis manos apretaban y acariciaban esas hermosas y grandes tetas, esto generaba que Cindy estuviera apunto de venirse en mi boca.

C: No mames, ah, uhm, ah, ah, que rico, no mames, me vengo, uhm, ¡¡ah!!

O: ¡¡Si!!! ¡Dame tu jugo!

Cindy se vino en mi boca expulsando chorros de placer, no me la creía que un mujeron como ella estuviera orgasmeandose por mis mamadas.

Yo la solté y me acosté, sin decirle nada se fue directo a mi verga y comenzó a darme una muy rica pero muy rica mamada.

C: ¡¡Uhm!! Esta rica tu verga, mmm, ¡pensé que eras pito chico!

O: ¡Pues lo soy uhm!! ¡Jaja!

C: Para nada. Creeme, he visto demasiados y tu estas grande!

Que una mujer como ella me dijera eso mientras me la chupaba me hacía subir mi ego, Cindy chupaba por completo mi verga, mordía mis huevos, lamía mi glande y con sus manos bajaba y subía mi cuero, que buena mamda.

Cindy decidió que era momento de estar dentro, así que subió encima mio y solita se ensarto, no me puso el condon y para mi eso fue fenomenal.

Y es que yo se que estoy mal y soy un irresponsable pero sin condon es mejor y más con una mujer como Cindy, así buenota, nalgona, chichona, a esas hay que darles al natural.

O: ¡Que rico te mueves, uhm!

C: Que dura esta.

Cindy se movía fantástico, su cadera iba de arriba a abajo, de adelante para atrás y en círculos y mientras ella estaba encima mio yo me devoraba sus tetas, grandes, duras y con ricos pezones.

O: Esto es el mejor regalo de mi vida, ¡¡uhm!

C: ¿Te gusta?

O: ¡¡Si!! Gracias.

Acosté a Cindy y acomode sus ricas piernas en mis hombros y comencé con el mete y saca, mientras ella me abrazaba el cuello con sus ricos muslos, yo le besaba el cuello y le daba lo mejor de mi, quería quedar muy bien con ella.

El mirarla mordiéndose sus labios y moviendo un poco su cadera mientras yo levantaba sus piernas y se la dejaba ir con fuerza me decía que ella lo estaba gozando.

C: Así, uhm, así Oswaldo, ¡¡ah!!

O: Toma, uhm, agh, soñaba con cogerte, ¡¡uhm!!

C: ¡Te la jalabas pensando en mí!

O: Cogía con mi novia y pensaba en ti.

Mi confesión la puso mas caliente y comenzó a tomar el control de las acciones, me pidió me pusiera de pie y ella tambien se paro de la cama, me abrazó al cuello y levantó su pierna la cual yo tomé con mi mano y entonces me pido penetrarla, esa pose era el mismo cielo, nos besábamos y ella movía su cadera de forma fenomenal, honestamente tenía que respirar para no venirme aun.

C: ¿Te gusta?

O: Que rico, uhm, besas muy rico! Y cómo te mueves.

Agarrando con una mano su pierna y con la otra sus ricas nalgas me movía a su ritmo, Cindy me mordía el cuello pero la verdad no me importaba que me dejara un chupeton, en ese momento me sentia solo de ella.

C: Que rico, uhm, cogeme, ah, ¡¡cogeme!!

O: ¡Ponte de perrito!

Cindy se empino en la cama, se veia riquisima en cuatro, yo la tome de las nalgas y se la di de una.

C: ¡¡oh!! Que rico, agh, ¡¡ah!!

O: ¡¡Uhm!! Que bien se siente, uhm, ah, ¡mmm!

C: Metemela, ahh, no pares, ¡¡métemela!!

Obedecí su petición, la tomaba de la cintura y se la daba con fuerza, mi verga estaba dura e hinchada pero no me importaba ya que tenía contenta y gustosa a esa hembra.

Me empujaba como si no hubiera mañana, ella también se movía, la tomé del cabello y le di unos buenos golpes en sus nalgas y eso la puso mas puta.

C: Si, Oswaldo, no mames, que rico, ah, soy tuya, uhm, ¡me vengo!

O: Yo también, uhm, me voy a venir, me voy a venir!!

Bastaron unos cuantos movimientos más para que ambos comenzáramos a venirnos, ella se venia a chorros y yo se la saque para venirme en su espalda.

C: Que rico, uhm, ¡¡no me defraudaste!!

O: Gracias por el regalo, este será un muy buen cumpleaños.

Cogimos toda la noche, en muchas poses, me vine en sus tetas, en su espalda, en el piso, Cindy era una ninfomana y por suerte aguante todos los palos que ella quiso.

Salimos como a las 8 de la mañana y la deje en su casa y yo me fui a desayunar con mi novia, sabiendo que algo fantástico llegaría a mi vida.


Imagen únicamente de caracter ilustrativo para este relato erótico

 

En vivo ahora

Deja un comentario

esposasymaridos