La sexualidad con mi esposa nunca había sido del todo buena, siempre tenia yo la impresión de que ella no quedaba satisfecha aunque nunca me lo decía. Hacemos el amor una o dos veces a la semana pero ella nunca mostraba mucho interés. Yo amo a mi esposa y en verdad me encanta, por eso empece a buscar formas de que ella disfrutara mas. Empece a comprar juguetes sexuales de todas formas y tamaños, con algunos de ellos mi esposa parecía disfrutar cuando los usábamos y esto me hizo visitar frecuentemente la sex shop en busca de novedades.En una ocasión, me encontré con un ex novio de mi esposa. El muy amable me saludo y me pregunto como estaba mi esposa, platicamos un rato y después me pregunto que buscaba en esa tienda, aunque era obvio le dije que buscaba algún juguete para usarlo con mi esposa. En seguida el me dijo que si no me molestaba el me podría decir que le gustaría a mi esposa.
Al principio me desconcertó, pero despumes acepte su ayuda. El me enseño un vibrador que tenia dos puntas, una para la vagina y otra para el ano y me dijo que este tipo de juguetes le gustaban mucho, que la hacían disfrutar y tener grandes orgasmos. Termine comprando ese vibrador y me despedí de este mi nuevo amigo. Esa noche le enseñe el juguete a mi esposa y sin disimular me dijo que quería estrenarlo de inmediato, cosa que hicimos y en verdad disfruto esa noche, tanto con el vibrador como con mi pene.