Si bien mi inicio como activo en el mundo homosexual fue realmente inducido por una pareja, debo aceptar que fue una experiencia que me marco, pasado un tiempo en el que procese la experiencia comencé a buscar contactos gay 100% pasivos, hasta ahora sigo sintiéndome puramente penetrador sin ninguna inclinación a ser pasivo.
Vivimos en una época de infinidad de medios de contacto, asi que buscar y encontrar culos hambrientos de verga no es nada difìcil, lo difìcil es encontrar personas sencillas que sòlo necesiten de encuentros sexuales placenteros y por que no, generar una relaciòn amistosa y càlida sin complicaciones.
Conocì y disfrutè con algunos pasivos, no todas fueron experiencias fabulosas, algunas tuvieron sus bemoles, otras si fueron muy satisfactorias en el plano sexual, pero hubieron complicaciones en la relaciòn, hasta me topè con alguien que consumìa cocaìna, siendo casado y padre de familia no puedo darme el lujo de complicarme la vida con una relaciòn conflictiva por que amo a mi mujer y a mis hijos mas que a nada.
Esta afición por los pasivos me brotò de la nada y he tratado de sobrellevarla con el mayor sigilo y cautela, pero siendo honesto, no hago nada por reprimirla y ya aprendì que no es nada difìcil conseguirse una cola hambrienta.
Soy un ejecutivo de una empresa internacional y viajo frecuentemente por todo el paìs por negocios, me hospedo en hoteles 5 estrellas y habitualmente viajo en avión excepto cuando mi destino es cercano a mi ciudad de residencia y entonces viajo en mi propio automóvil.
Hay ciudades a las que viajo con màs frecuencia y en una de ellas me tocaba que me atienda un Bell Boy en mi hotel de costumbre, siempre que llegaba ese chico se apresuraba a atenderme y notè en sus maneras una reprimida homosexualidad, se aprende a leer ese lenguaje, pero al inicio lo ignoré.
Una ocasiòn estando en ese hotel me iba a bañar y al abrir las llaves del agua se comenzó a anegar el baño, llamè a recepción y me ofrecieron cambiarme de habitación inmediatamente, llegò el chico mencionado a ayudarme al cambio de habitación pero yo seguía encuerado y solo con la toalla en la cintura, el chico se descontrolò y aunque se puso a reunir mis pertenencias volteaba insistentemente a mirarme cuando me quitè la toalla y me comencé a vestir, ya fuè inconfundible su reacción homosexual y despertó mi interès por completo.
Durante esa estancia charlè con èl ya con la idea de acercármele lo necesario y palpar si podrìa conquistarlo, me contò que estudiaba en las tardes y busquè estar por ahi cuando terminò su turno, le ofrecì llevarlo en el auto a la escuela y aceptò, durante el camino fuì muy amable y abierto, en cierto momento puse mi mano en su muslo como una muestra de amistad, sentí como se estremeció, lo tranquilicè y le dije que me disculpara pero sentí que podìamos ser muy buenos amigos y querìa que lo supiera.
Lo invitè a cenar cuando terminaran sus clases y aceptò, fui por èl a su escuela y cenamos lo que èl eligiò, me comentó cosas de su vida familiar y cosas de su infancia, ya no tuve duda que era un homosexual reprimido, asì que decidì hacerlo despertar a su homosexualidad.
Durante el camino a su casa detuve el auto y lo mirè fijamente a los ojos, le dije que yo sabìa lo que èl sentía y que sabìa que no era nada fàcil vivir simulando, lo sorprendì y lo besè en la boca, apenas intentò resistirse pero lo sujetè con firmeza y prolonguè el beso metiendo mi lengua en su boca, sentí como se estremecía y se fuè relajando, prolonguè el beso hasta que lo sentí completamente coperativo…
Entonces le dije que yo tenìa experiencia como amante de personas que sentían como èl y que serìa para mi un privilegio si me permitìa ser quien lo iniciara sexualmente como quien era, primero quiso negarlo, pero lo volvì a besar y cuando viò que me acerque ya no se resistió, le acariciè las piernas y la cara, le dije que era muy atractivo y una vez mas lo besè y entonces èl correspondió
Se bajó del auto en su casa en silencio, al dìa siguiente me evitò todo el dìa cuando yo estaba en el hotel, al tercer dìa ya me fuè a ver en el restaurante mientras desayunaba para llevarme un periódico, me saludo eludiendo mirarme, le dije disimuladamente que actuara normal porque nada pasarìa si èl no lo querìa y no habìa por que hacer que otras personas notaran que ya no era el mismo conmigo, me mirò a los ojos y vi que estaba ansioso, le di una de mis tarjetas con el nùmero de mi celular y le dije que durante ese dìa pensara lo que decidiría y que me llamara para decírmelo.
En la tarde desde su escuela me llamò, me dijo que yo lo habìa inquietado muchìsimo y que ya no podìa pensar en otra cosa pero que tenìa mucho miedo y que no tenìa idea de còmo o dònde podrìa ser lo que le propuse, la suerte ayudò porque al dìa siguiente el tenìa su descanso en el hotel, asi que le propuse que desayunaramos juntos en un lugar distante de su trabajo, quedamos de vernos en un lugar y yo de inmediato cancelè mis citas de la mañana.
Nos encontramos puntualmente a desayunar y le dije que iríamos a un motel en las afueras de la ciudad, le di detalles y lo vì menos temeroso, terminamos y enfilamos para el motel, yo llevè una toalla de mi habitación y le dije que se cubriera la cabeza a la entrada, nadie podrìa saber quièn me acompañaba y eso le tranquilizò, yo habìa sido precavido para que todo fuera ideal para èl
Entramos al garaje privado del motel y ya se quitò la toalla, estaba excitado, antes bajar del auto se avalanzò a besarme con ansiedad, en ese momento èl me excitò a mi, entramos a la habitación y me sorprendì de su ambiente, buena iluminación, perfumada, con tina de hidromasaje y una cama King zize, espejos por todos lados, sin ninguna prisa lo atraje hacia mi y volvimos a los besos.
Esta vez èl era todo pasión, me abrazaba y se ponìa de puntas para alcanzar mi boca, es un joven delgado, de cara bonita, lampiño, mientras el beso seguía muy intenso bajè mis manos y lo tomè de las nalgas para acercarmelo muchìsimo, aùn no tenìa la seguridad de que fuera virgen, pero sus reacciones me hacían pensar que lo era, nisiquiera se lo preguntè
Nos deshicimos de la ropa pesada quedando en ropa interior ambos, yo lo fui desvistiendo y eso le gustò, lo dejè en truza, notè que era nueva, no parabamos los besos, èl instintivamente me besaba el pecho y me abrazaba, lo sentía temblar, le dije al oído: no vamos a apresurar nada, todo se va a dar de forma espontànea y natural, sòlo vamos a responder a nuestros instintos, debes hacer lo que tu necesitas hacer, lo que has deseado hacer, me respondió con otro beso màs ardiente y casi me arranca la ropa interior que me quedaba encima.
Se inclinò y tomò mi verga entre sus manos, sopesò mis testículos, volteò a mirarme a los ojos y me preguntò si podìa chuparla, yo asentì y se hincò, la acariciò con dulzura y comenzó a besarla, recorrìa mis 18 centímetros a besos sin soltar mis bolas, me tenìa bièn erecto el muchacho fregado…
Finalmente volvió a mirarme a los ojos y abrió la boca para meterse la cabeza, le dije que se veìa hermoso con mi verga en su boquita y eso lo animo a engullir otro tramo metiendo y sacando con deleite, cada vez intentaba avanzar mas verga dentro pero llegò a su lìmite cuando le vino una arqueada, asi que hasta esa profundidad continuò otro rato haciendo los tìpicos ruidos de una mamada clàsica.
Decidì avanzar y lo levantè, lo besè con un beso màs sucio, masajeandole las nalgas y apretándolo fuerte contra mi, le dije al oído: si esta es tu primera vez tendrá que ser inolvidable, si no es la primera tendrá que ser la mejor que hayas tenido, se separò alarmado y me dijo:
Eres el primer hombre que me toca, te lo juro, me besò como queriendo convencerme, no esperaba que yo lo cargara como se lleva cargada a una doncella a la cama, se ruborizò y me rodeò el cuello con los brazos, lo llevè a la cama y lo depositè ahi con delicadeza: le dije que lo desvirgarìa con la misma dulzura que se desvirga a una Nena, con delicadeza y ternura, se enderezò a abrazarme con fuerza.
Le indiquè còmo debía colocarse encima de mi en la posiciòn de 69 para que pudiera seguir mamàndome la verga mientras yo le adoraba su hermoso culo, sus ojos brillaron y obedeció de inmediato, me ofrendò sus nalgas, me las acercò a la boca y èl se acomodò para volver a disfrutar mi verga en su boca, tiene unas nalgas carnosas y redondas, las acariciè a placer y finalmente las abrì para contemplar su ano, lampiño, muy apretado, tenìa algunas contracciones y aùn no lo tocaba.
Sentì que una de sus manos se apoderò de mis bolas y luego su boca de mi verga, regresò el sube y baja y esta vez ya lo hacìa mucho mejor, cuando sintió mi lengua hurgar su ano gimiò profundamente, mi lengua comenzó a lamerlo, a punzar ese hoyo muy cerrado.
Él se retorcìa con mis caricias y comenzó a mamarmela cada vez mas inteso y sentí que ya la metìa mas profundamente en su boca haciendo ruidos guturales, comenzó a mover las caderas para enfrentar mas mi lengua taladrándole el ano y se sacaba la verga de la boca para gemir y susurrar: ¡que rico lo haces papacito!
Fuè hasta ese momento cuando subìa y bajaba que me percatè que tenìa un pene pequeño, ya lo tenìa parado y no medìa màs de 12 centímetros, sus testículos son pequeños, en ningùn momento antes se me ocurrió mirarle su herramienta y sentí cierta tranquilidad de que lo tuviera pequeño, ya habìa tenido antes a un pasivo muy vergudo y nunca estuve tranquilo con èl.
Jalè a mi muchachito hacia mi y lo metì a otra tanda de besos ardientes, sè que eso es muy gratificante para un pasivo y los pone màs que dispuestos a lo que sea, amèn de que especialmente me encantaba besar a ese muchachito por su manera de reaccionar a los besos, lo tenìa encima de mi y entre beso y beso le preguntè si habìa fantaseado en alguna posiciòn para su primera penetración, sin vacilar me dijo que me querìa encima de èl, que necesitaba ver la cara de qjuien fuera el primero
Le cumplì su deseo, lo puse de espaldas en la cama, lo seguì besando otro momento y acerque mi pomito de vaselina blanca que llevaba preparado, le abrì las piernas y le dije que era hermoso y muy deseable, que me excitò desde que notè que le atraían los hombres, metì mi dedo en el pomito y le untè la vaselina en el ano ya muy relajado por tanta lengua que le habìa dado.
Su mirada era de complacencia y de lujuria, comencé a dedearlo suavemente en la entrada del culo, sentía sus contracciones, apliquè màs vaselina y metì el dedo sòlo un poco, se retorció y gimiò, era adorable verlo deseoso de lo que iba a probar, me dijo, Papi, la tienes algo gruesa, me va a doler, le dije: si, te va a doler cuando te la meta, lo harè despacio y delicadamente, tu me iràs diciendo cuando quieras màs, con decisiòn contestò: aunque me duela no quiero que pares Papi, te deseo muchìsimo
Le coloquè sus piernas en mis hombros, lo tenìa dominado y entregado, me miraba con una mezcla de miedo y deseo y eso es algo que a mi me cautivò, habìa desvirgado a tres mujeres en mi vida y este jodido muchacho era algo completamente diferente y la sensación era nueva y muy excitante, ni es posible explicar el placer que significa tener a otro hombre deseando que lo hagan gozar con la verga bièn clavada en el culo y pidiendo besos ardientes mientras lo zarandeo a vergazos.
Le coloquè la cabezota en el culo y le di el primer empujòn, el ano se resistió un poco pero a un poco màs de presiòn cedió, èl abrió grandes los ojos y su gemido fuè de miedo, eso me excitò màs, me quedè quieto esperando a que su año dilatara, le di un segundo empujòn y sentí su esfínter anal apretando, contrayéndose espasmódicamente.
Era su ùltima resistencia y la cara de mi muchachito estaba haciendo rictus de dolor, jadeaba y gemìa, me decìa que duele, y entonces cambiè la táctica, le dije que el dolor era parte del placer que un pasivo debe sufrir antes de conocer el paraíso, para que goces la verga como has soñado antes tienes que pagar con algo de dolor….¿quieres que te la saque?
Y ràpido dejò de gemir y dijo: ¡No Papito! por nada me la saques, te deseo mucho y quiero ser tuyo completamente aunque me partas en dos, justo en ese momento le empujè lo que le faltaba y mis huevos hicieron contacto con sus nalgas, soltò un gritito ahogado y le dije: ¿sientes mis bolas pegando en tus nalgas? Eso te indica que ya eres mìo completamente, ahora comenzaràs a sentir lo que es tener a tu macho cogiendote como tu necesitas
Le abrì las piernas y jalè una de sus manos para que palpara su culo totalmente penetrado, sòlo gritò diciendo: Ay Papito! Ya comienzo a sentirla muy rica!
Y entonces comencé a moverme dentro de èl con un ritmo suave y sacando la mitad de la verga y clavándosela complata, hice doblara sus piernas en mis brazos para que yo pudiera inclinarme hasta alcanzar su boca y entonces comencé a besarlo con fuerza mientras le bombeaba el culo, entre beso y beso le decìa: estàs muy rico mi Nenito, eres lindo y estas buenísimo, te estoy gozando muchìsimo! y vuelta a los besos y mas duro las penetradas, casi tenìa los ojos en blanco, le volvìa a decir: tienes un culo delicioso y ya es mìo completamente, me gusta còmo me entregaste tu virginidad
En ese momento le vino un cambio de actitud producto del placer que ya estaba sintiendo, me tomaba del cuello y comenzó a decirme: eres un machote hermoso Papi, me estàs cogiendo como yo ni imaginè que serìa de rico! No pares de cogerme Papi, es mil veces mejor de como lo imaginaba cuando me masturbaba, hazme todo lo que tu mandes para que me hagas gozar, soy tuyo Papito, era el momento ideal para sacarle la verga y ponerlo en cuatro frente a un espejo.
Ya habìa estado mirándose en el espejo del techo encima de la cama, ahora en uno lateral y otro de frente, le dije: quiero que te mires bien ensartado por tu Macho, quiero que disfrutes y comiences a moverte para gozar la verga, notè que su erecciòn estaba al máximo pero en ningùn momento se habìa tocado.
Le abrì las piernas y esta vez se la metì màs ràpido, se arqueò cuando le entrò completa y gimiò, volteò lo que pudo a verme y me dijo, me gusta que me duela cuando me la metes Papi, y a mi me gustò eso que dijo, comenzamos a coger y a hablar cada vez màs sucio, èl entro ràpido en la frecuencia, empinado estiraba la mano por debajo para tocarme las bolas que se campaneaban con cada embestida que le daba en el culo y no paraba de decir cosas…
¡Qué rico! Soy felìz de que me hayas convencido, me encantas porque eres un Machote y me quitaste el miedo, nadie me tratò como tu y me diste valor para entregarme, no me arrepiento de estar aqui porque lo estoy gozando muchooooo
Resultò parlanchín mientras me lo cogía y notè que eso me mantenía muy excitado, se la saquè y me tirè en la cama boca arriba, le ordenè que me montara y se ensartara el mismo la verga, hizo una pausa para ponerse èl mismo màs vaselina en el culo y obedeció de inmediato, se montò, buscò mi verga con su mano y se la acomodò en el culo para sentarse en ella de inmediato, esta vez no se detuvo hasta sentirla toda adento y sus gemidos de placer regresaron, le dije:
Ahora tu pones el ritmo de tu placer, comenzó el mete saca y se le saliò varias veces, pero ràpido tomò el ritmo y comenzó a moverse con destreza, gozándola, lo inclinè hacia mi para que pudiera besarlo y sus manos rodeaban mi cara cubriéndome de besos y sin dejar de subir y bajar en la verga, repitiendo sus frases cachondas y jurando que serìa mìo y solo mìo cuando yo lo deseara, durò en la cabalgada un buèn rato hasta que se cansò y entonces lo puse de lado y yo detràs de èl, lo empalè desde atràs y de inmediato volteò la cara para lograr besarme, yo ya estab muy caliente y comencé a bombearlo con màs fuerza, cuando estaba dándole muy duro me dijo con voz quebrada
¡Papi me estoy viniendo! No pares Papi, eso me sorprendió porque no se habìa tocado la verga para nada! y tambièn fuè como un gatillo que accionò mi eyaculación, me sorprendió que eyaculè màs abundantemente que de costumbre y ambos gruñìamos como animales, èl volvió a voltear su cara para besarme intensamente y decirme que era maravilloso lo que yo le habìa hecho.
Nos metimos a la tina de burbujas a juguetear, el agua caliente nos relajò, èl comenzó a sobarme la verga con los piès y cuando viò que se estaba parando se le ocujrriò echarse una mamada submarina, el juego se repetiría, pero ya serà motivo de otro espacio de relato, sòlo les dirè que lleva 3 años de ser mi amante y ahora ya disfruta de ponerse lencerìa para ser mi puta, le encanta sentirse mi puta, en su vida privada sigue siendo un muchacho estudioso y trabajador, ya no es Bell Boy, ya es Recepcionista.
Imagen únicamente de caracter ilustrativo para este relato erótico…
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