Mucho se ha hablado de las mujeres multiorgásmicas. Muchas chicas afirman que son capaces de tener varios orgasmos a la vez o en su defecto, muchos seguidos. Pero lo cierto es que por otra parte, hay un montón de personas que no tienen claro que las mujeres multiorgásmicas existan de verdad, y creen que son un mito de nuestro tiempo.
Hoy queremos aclararos que lo que hay de cierto alrededor de la multiorgasmia. La multiorgasmia es una capacidad que pueden tener tanto hombres como mujeres, aunque es cierto que es más normal ver estos casos entre las chicas, y consiste en poder experimentar distintos orgasmos en un mismo acto sexual.
Lo mejor de esta capacidad sexual es que todas las mujeres, absolutamente todas, pueden ser multiorgásmicas. El problema es que para ello las chicas deben querer serlo y han de entrenarse para ello. Y es que hay muchas mujeres, cuando llegan al primer orgasmo, se quedan tan sumamente relajadas que es posible que no tengan ganas de nada más.
Esto se debe a que en el sexo, muchas veces , es más importante la calidad del orgasmo que la cantidad, pero si hay alguna chica que quiere experimentar, y sentir lo que se siente al ser multiorgásmica, siempre sin obsesionarse, tan sólo debe seguir los siguientes consejos.
Lo primero que debe hacer una mujer para ser multiorgásmica es intentarlo ella misma. No hay nada mejor que la masturbación para saber cuáles son los puntos de placer principales, el ritmo adecuado y en definitiva, la manera más eficaz y placentera de tener un orgasmo. Una vez que ella ha llegado al primer orgasmo es vital que no se pare, ya que de lo contrario tendrá que volver a empezar desde el principio.
Si la mujer nota que el punto de placer seleccionado para llegar al primer orgasmo está muy sensible y la es imponsible seguir estimulándolo, tan sólo tiene que continuar haciendo lo mismo por los alrededores de ese punto. El cuerpo reaccionará y poco a poco, se llegará al segundo orgasmo. Y así sucesivamente. El límite lo marcara la propia persona. Es decir, las mujeres pueden continuar hasta donde ellas mismas quieran llegar.
Además los hombres por su parte también pueden llegar a ser multiorgásmicos. Hay hombres que lo consiguen sin ningún aprendizaje, mientras que otros sí necesitan traspasar la barrera que les supone el período refractario con determinados ejercicios como hacer programas de contención de orina (cuando se necesite orinar, se empieza y se detiene el proceso unas seis veces), ejercitando los músculos púbicos (contraer estos músculos y contar hasta tres. Después, relajarse y repetir el procedimiento diez veces) y a través de la masturbación (un ensayo previo para practicar la contracción antes de hacerlo en pareja).
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