Relato sexual de como fui desvirgada por un madurito

Mi nombre es Andrea, tengo 18 años y quiero contar mi experiencia sexual en este relato de como fui desvirgada por un madurito.

Estaba en mi casa viendo televisión, de repente sonó el timbre, me levanté a abrir la puerta. Encontré un hombre maduro, yo calculé unos 38 años.

– Hola buenas tardes -dijo el hombre-.
– Hola. ¿A quién busca?.
– Al señor Enrique.
– Si, es mi padre, pero no se encuentra, si desea puede pasar y esperarlo.
– Te lo agradezco.

Sé que no se debe dejar pasar extraños, pero conocía a mi padre. Pasó y se sentó en el sofá donde yo estaba, pasé y me senté junto a él. En ese momento pasó justamente en la televisión una escena de sexo.

De repente sentí una mano en mi muslo derecho, lo volteé a mirar y él me sonrió.

– ¿Cuánto demora tu padre? – dijo.
– Dentro de 30 minutos.
– Suficiente tiempo. ¿No crees? – Dijo mientras se acercaba a mi rostro.
– Más que suficiente – Me abalancé y lo besé.

relato desvirgada por un maduritoNunca había sentido esto, yo no había tenido sexo nunca, y este hombre no estaba mal a pesar de que estaba madurito para mí. Me empezó a acariciar la entre pierna, mientras nos besábamos, me daba un poco de susto por ser mi primera vez, pero realmente quería sentir eso de lo que tanto hablaban.

Me fue desvistiendo, sus manos experimentadas recorrían todo mi cuerpo, realmente yo estaba excitada, y deseosa. Se sentía genial, me besó el cuello, luego fue bajando lentamente a mis senos, los besaba y luego empezó a mordisquear mis pezones…

Yo cada vez estaba más y más excitada, estaba cogiendo e iba a ser desvirgada por un madurito!. Él siguió tocándome, finalmente los dos estábamos completamente desnudos.

Yo lo quería dentro de mí en el menor tiempo posible, quería que yo fuese suya.

Jugueteó un buen rato con mis senos, y volvió a besarme. Metía su lengua hasta el fondo, me hacía disfrutar con sus besos, pero no hacía lo que era importante, no metía su pene en mí, no me hacia totalmente suya.

Mientras me besaba y me hacía vibrar tomé su pene y empecé a masturbarlo. Él se estremeció, volvió a besarme y fue bajando por mi cuerpecito caliente. Pasó por el cuello, luego por mis senos nuevamente mordisqueándolos, haciéndome estremecer de placer, mientras su pene se ponía cada vez más duro.

Bajó por mi estómago, hasta que finalmente llegó a mi vagina. Empezó a besarla suavemente haciéndome estremecer, luego metió su lengua hasta el fondo haciéndome vibrar, no quería que parara, disfrutaba sentir su lengua dentro de mí.

Lo aparté de mí e hice que nuestras lenguas se encontraran nuevamente. Me envolvió nuevamente en esos besos apasionados que me dejaban sin aliento, mientras tomaba su pene y lo dirigí a mi vagina. No podía aguantar más, quería que me desvirgara lo antes posible.

Su pene entró suavemente por mi rajita, amé esa sensación, el miedo que tenía al inicio desapareció, él empezó a envestirme cada vez más fuerte, la adrenalina aumentaba y el tiempo se iba acabando.

De repente oímos un coche llegar, era mi padre, pero yo no podía parar, él me levantó y se dirigió a la segunda puerta en el pasillo que era mi cuarto. Me embistió más y más hasta que finalmente se corrió dentro de mí. Fue la sensación más apasionada y deliciosa que pude haber vivido, se vistió rápidamente y salió.

Afortunadamente mi papá hasta ahora entraba por la puerta y no se percató de nada.

Pero aquí no termina esto. Me vestí rápidamente y salí.

– Hola padre, el señor me dijo que venía a verte por eso lo dejé pasar para que te esperara.
– Si Andrea, pero tengo que volver a la oficina a traer los documentos que el señor necesita, ¿te importaría servirle un trago mientras yo regreso?
– Claro padre, será un placer, vete tranquilo, tómate tu tiempo.
– Gracias cielo, no tardo.

Tras el azote de la puerta, me giro ante este hermoso madurito que me había desvirgado, salté sobre él, y fue otra ronda de buen sexo, para esperar que llegara mi padre.

Me encantó ser desvirgada por un madurito, sentí mucho placer el estar con él, y siempre busqué otra oportunidad así, pero ya no se presentó.

Solo espero que algún día vuelva y tengamos otra ronda de sexo duro y besos apasionados.


Relato anónimo enviado por Andrea a la página.
Imagen de caracter ilustrativo para el relato sexual desvirgada por un madurito

 

En vivo ahora

Deja un comentario

esposasymaridos